Los vecinos vuelven a la sombra
ARBOLES PARA EL BARRIO, CIUDAD VERDE
El vecindario se cobija debajo de un almez para pedir más árboles y políticas contra el cambio climático
La asociación de vecinos El Tajo pide a las administraciones, por tercer año consecutivo, que trabajen de inmediato contra el cambio climático y, en concreto, al Ayuntamiento, que lleve a cabo un plan de arbolado y aproveche el POM para diseñar una ciudad verde, menos inhóspita y más habitable
Toledo, jueves, 11 de julio de 2024.
– Más de 30 vecinas y vecinos del barrio del Polígono se han cobijado esta mañana bajo un almez del barrio del Polígono, siguiendo la llamada de la Asociación de Vecinos El Tajo para denunciar, por tercer verano consecutivo, la falta de árboles en nuestro barrio y en nuestra ciudad y, además, exigir a las autoridades que tomen medidas contra el cambio climático, del que el calor extremo que estamos viviendo es una de sus manifestaciones más claras. La coordinadora de la asociación, Gemma Ruíz Azaña, ha recordado que este almez se ha convertido ya “en nuestro árbol fetiche, en el que queremos simbolizar lo que nos dan los árboles, sombra y oxigeno, vida en definitiva, esenciales para nuestra supervivencia tan amenazada por los estragos derivados del calor extremo que provoca el cambio climático”.
“La sombra de los árboles nos da un respiro, nos ofrecen su refugio y en ocasiones, nos salvan de un golpe de calor y otras consecuencias para nuestra salud”. Ruiz ha explicado que “desgraciadamente, tememos que año tras año tenemos que alzar la voz ciudadana para exigir a los políticos que actúen, que no den la espalda y, mucho menos, den pábulo al negacionismo más rancio del cambio climático”. Así, ha criticado que “cambian los representantes políticos, pero los ciudadanos seguimos abandonados a nuestra suerte, a un futuro muy incierto”
En este sentido, ha señalado que en nuestro barrio y en la ciudad de Toledo “cosas tan básicas como dar un paseo, jugar en un parque o esperar en la parada a que llegue el autobús, se ha convertido en un reto imposible por el calor sofocante que tenemos que soportar en nuestra ciudad que, además, no está preparada para hacer nuestra vida más agradable y amable”. Ha recordado que nos esperan temperaturas superiores a los 42 grados.
Otra pelea antigua en nuestro barrio es la falta de fuentes de agua, que han ido desapareciendo y no se han repuesto. Nuestra asociación diseñó un itinerario de fuentes públicas en nuestro barrio que no se tuvo en cuenta en los presupuestos participativos y, que sin duda, “ayudarían a a los vecinos que transiten por sus calles a beber y refrescarse”, ha agregado.
Los expertos destacan que la naturaleza urbana es absolutamente necesaria para compensar nuestro impacto y el del cambio climático, y para ello, las ciudades necesitan de un arbolado viable y estratégico, con grandes copas, y con esperanza de vida mucho más amplio. Se necesita suelo libre que deje refrigerar el suelo y que no se acumule calor, que genera islas calóricas.
Los árboles necesitan alcorques amplios y silvestres libres de pesticidas y del peligroso glifosato, que aún se usa en nuestra ciudad. Se necesitan árboles autóctonos que no sea necesario podar, porque las podas perjudican la esperanza de vida de los árboles, que son “los aires acondicionados de las ciudades”. «Un árbol equivale a 10 aires acondicionados», ha recalcado.
En una sociedad cada vez más desigual, Gemma Ruíz ha puesto de manifiesto que el cambio climático “ahonda la brecha de la desigualdad social en nuestro país y en todo el mundo, ya que existe un elevado porcentaje de familias y personas que no pueden hacer frente a las temperaturas extremas que estamos padeciendo, sencillamente, porque no pueden pagar un aire acondicionado. “El calor extremo puede producir efectos devastadores para la salud de las personas e incluso la muerte”, ha agregado.
La asociación de vecinos considera que la lucha contra el cambio climático “no admite más demoras ni medias tintas, continúa Ruíz Azaña, por lo que emplazamos al Ayuntamiento liderado por Carlos Velázquez a que se ponga manos a la obra y desarrolle un plan de arbolado de la mano de los técnicos y expertos, en lo que, sin duda, contará con nuestra asociación” y ha resaltado que “la OMS considera como imprescindible que en las ciudades haya al menos un árbol por cada tres habitantes y en Toledo estamos aún muy lejos de esta cifra”. “Estamos muy lejos de estas cifras salvadoras”.
La coordinadora de la asociación considera que el nuevo Plan de Ordenación Urbana “es una gran oportunidad para que el Ayuntamiento diseñe una ciudad verde, reduciendo el cemento y el asfalto y apostando por infraestructuras verdes, permitiendo que la naturaleza y la biodiversidad se adueñen de la ciudad y la haga más habitable para las personas”.
Medios de comunicación se hacen eco de las reivindicaciones de los vecinos.