Ahora les sobran camas en los hospitales
Cospedal y nuestra Sanidad Pública
Emiliano García García
Ahora leemos en prensa en este mismo diario «el Sescam asegura que se habilitará un ala en uno de los centros del complejo hospitalario y que existen camas suficientes para poder trasladar a los ‘enfermos comunes’ que estén en esa zona a otras plantas de este centro o a otros hospitales de la ciudad».
Díganos señor Echaniz y señora Cospedal por que en multitud de ocasiones se tienen a enfermos rodando por los pasillos hasta que les dan una habitación, sangrante en el caso de ancianos.
Ahora sacan pecho y recurren a lo de siempre, «lo más importante es pedir tranquilidad y confiar en los profesionales sanitarios». Debemos confiar y confiamos en los profesionales, profesionales que una y otra vez se quejan y podemos observar trabajan en condiciones poco deseables.
Sigamos, pasarse 10 o 12 horas de esperas para hacerse pruebas en urgencias no podemos admitir que sea normal, y a veces en que condiciones, claro el señor Echaniz y la señora Cospedal nunca sufrirán esta espera en caso de necesidad.
La administración de la Sanidad Publica está minando las bases de esta, ¿se puede tener una semana esperando una gastroscopia, o cualquier otra prueba bastante común, ocupando una cama que otro necesita, y generando un coste absurdo?, pues si y es normal y desde luego ni beneficia al paciente ni colabora a reducir gastos. Parece que el diseño actual de la Sanidad Pública está dirigido a la destrucción de este.
Expliquen ahora por que el centro de referencia para enfermedades tropicales Carlos III se ha ido desmontando, convirtiéndolo en un apéndice de La Paz. Esta especialidad es histórica en el Hospital Carlos III ya que recoge la herencia del antiguo hospital del Rey, especializado en medicina tropical y del viajero desde principios del siglo pasado.
Por último hay una situación que me llama poderosamente la atención, Cospedal tan aficionada a dispensarnos la atención sanitaria mandándonos para cualquier tratamiento a Madrid, » o a la conchinchina», (alguna vez tendrán que explicar también esto), ahora para el ébola tenemos una planta en cualquier hospital de las capitales provinciales Talavera etc.
Si, eso es lo que me llama poderosamente la atención, desde mi punto de vista ¿No tiene mas lógica concentrar un solo hospital el tratamiento o prevención de la enfermedad?. Si se ha ocupado ya el Carlos III, por que dispersar a posibles nuevos enfermos o pacientes en observación ¿Esta dispersión no provocará que la aplicación de los recursos sea mas costosa y de menor eficacia y con mas riesgos?
Emiliano García García
